Ciencias y Tecnología

El color de los espacios influye en el rendimiento y humor de los escolares

Una mala iluminación y la recarga de elementos y colores inadecuados pueden afectar notablemente al cuerpo mental y físico del niño en edad escolar, generando depresión, aburrimiento y fatiga.

Más allá del embellecimiento del espacio a través del  color, es fundamental que “se generen espacios funcionales utilizando el color correctamente. De esa manera, podremos facilitar la buena visibilidad y crear ambientes que propicien el bienestar y equilibrio mental de los niños, lo cual es indispensable en cualquier labor de asimilación y estudio”

Jugar y divertirse

Para los espacios de recreación, se recomienda crear combinaciones complementarias que son las que producen un mayor grado de contraste. De esa manera se generará dinamismo y movimiento en los espacios recreativos. Para lograrlo se puede usar un azul intenso, un azul claro y un amarillo. Otra combinación perfecta para un espacio lúdico podría surgir aplicando naranja fuerte, verde y un color neutro.

La tarea puede ser más divertida si los padres dejan que sus hijos elijan las tonalidades y experimenten con las combinaciones utilizando la aplicación Glidden ColorAPP: “Esto favorecerá que se encuentren más a gusto en su espacio personal. Incluso si la habitación es de su gusto, será más fácil que cuide todo lo que hay en ella y la mantenga limpia y ordenada”,

Rendimiento académico y concentración

En habitaciones de estudio se pueden aplicar tanto colores fríos como cálidos, combinados con colores neutros, siempre dependiendo de la función que tenga el espacio.

Para “calmar” a los estudiantes e incentivar la concentración, se sugiere “tonos verdes suaves, verde azulados, azules claros o azules grisáceos. Si queremos crear una sensación de calidez y estimular la actividad mental y la creatividad podemos utilizar un amarillo suave, un naranja pálido o un rosa pastel”.

En las aulas de estudio se deben evitar las paredes blancas, debido a que reflejan demasiada luz y esto puede causar fatiga ocular, perjudicando el rendimiento del estudiante a corto plazo. Así mismo, Ruiz recalca que debemos evitar aplicar grandes proporciones de color negro por su potencia absorbente o colores pardos o grises, que crean ambientes tristes y depresivos.

Algunos ‘tips’

– Utilizar distintas técnicas como pintar en bloques o franjas de color

– Utilizar la Fórmula adecuada para que la combinación de colores sea balanceada: 60% del espacio con el color predominante, 30% con el color intermedio y un 10% con el color de acento.

-Si el espacio es reducido y con poca iluminación se recomienda emplear el tono oscuro solamente en un 10%, aplicar un 60 % con el tono más claro para que nos aporte luz y ayude a dar la sensación de un espacio más amplio y el 30% el color intermedio”.