No existe delito en el caso del decomiso de toneladas de aletas de tiburón
Javier Collins Agnew / La Verdad Panamá
Luego de dos audiencias celebradas tras la detención de cinco personas y el decomiso de toneladas de aletas de tiburón, los jueces han concluido que la débil presentación y poca vinculación no justifica las detenciones de los acusados asiáticos y propietarios de venta de mariscos, informó el abogado José Antonio Moncada.
Según el jurista, el Ministerio Público no se centra en verdaderos delitos y tarde que temprano tendrá que indemnizar los comercios cerrados por el antojo de desviar la atención pública y no la de combatir ningún crimen.
Moncada calificó de un verdadero show las actuaciones del Procurador General de la Nación (PGN), Javier Caraballo, cuando de forma errada, según el abogado, denunció actuaciones que no constituyen delito, como lo es el guardar aletas de tiburón.
Los hechos se dieron el 13 de julio, cuando la Fiscalía Primera contra la Delincuencia Organizada y la Fiscalía Superior de Ambiente, con el apoyo de la Policía Nacional, realizaron la operación Shark, por delitos contra la Seguridad Colectiva, en la modalidad de delincuencia organizada, contra el Ambiente y el Ordenamiento Territorial, en la modalidad de delitos contra la vida silvestre.
La abogada Miriam Benítez, asociada a la firma Moncada Abogados, encabezó la defensa y con argumentos magistrales, opacó a la fiscalía que pretendía ver detenidos preventivamente a los comerciantes panameños.
Moncada aseguró que el aleteo de los tiburones no está prohibido, y quedó asentado en la audiencia que se llevó a cabo tras el hallazgo de aletas, mas no de algún delito.
El abogado dijo desde la primera audiencia, que no existen leyes vigentes que castiguen, lo que Caraballo en una conferencia de prensa quiso calificar como un logro contra el crimen, cuando en realidad se trata de un gran fracaso del Fiscal General.
Tras la Operación Shark se detuvieron a cinco personas y se incautaron más de 6 toneladas de aletas de tiburón y caballitos de mar, las cuales estaban siendo comercializadas.