Amenazas de huelgas seguirán destruyendo el mercado laboral y alejando la inversión privada que tanto se necesita
En medio de amenazas de huelgas, consignas, campañas mediáticas de descalificación y zozobra mundial por el “efecto Trump”, el panorama laboral panameño se sigue deteriorando, consecuencia de la fuerte caída en la inversión privada en los últimos 5 años, agravada por el cierre minero y la pérdida del Grado de Inversión en el 2024.
Este es el análisis que dibuja el ingeniero René Quevedo consultor en temas laborales quien plantea que la repentina interrupción de $900 millones de compras anuales de la operación minera a 24 sectores de la economía, la disminución de $2,165 millones en financiamientos bancarios al sector productivo, producto del aumento de las tasas de interés debido a la pérdida del Grado de Inversión, y la pérdida de $1,600 millones de flujo de Inversión Extranjera Directa (IED) entre 2019 y 2024, representaron la desaparición de $4,600 millones de dinero privado de la economía, al tiempo que la deuda externa aumentó en $27 mil millones en ese mismo período.
Observa el experto que el impacto ha sido dramático. En el 2024, MITRADEL tramitó unos 100 mil contratos laborales menos que en el 2019 (26% de reducción). De hecho, en octubre 2024 MITRADEL realizó una Feria de Empleo conjuntamente con KONZERTA, donde se ofertaron 3 mil vacantes y se presentaron más de 100 mil solicitantes.
La incertidumbre continúa. En los dos primeros meses del año 2025, la entidad procesó una media de 23,365 contratos por mes similar al promedio mensual del 2024 (23,239).
Sin embargo, 87% de los contratos 2025 son Temporales (Definidos y Por Obra Terminada), cifra significativamente superior al promedio de los 3 años anteriores (75% en 2024, 76% en el 2023, 77% en el 2022) y sólo comparable a la del 2021 (85%), primer año post pandemia, durante el cual hubo un gran nivel de incertidumbre.
Indica Quevedo que entre agosto 2019 y octubre 2024, 44,261 asalariados privados perdieron sus empleos, pero agregamos 19,409 nuevos funcionarios y 28,372 informales a la economía.
Es decir que DE CADA 5 EMPLEOS QUE GENERA HOY LA ECONOMÍA, 3 SON INFORMALES Y LOS OTROS 2 SON FUNCIONARIOS, FINANCIADOS A TRAVÉS DE PRÉSTAMOS.
En ese lapso (2019-2024), la deuda externa panameña aumentó en más de $27 mil millones, de $26,612.42 millones (junio 2019) a $53,736.74 millones (diciembre 2024), a razón de 5,425 millones por año, 8 VECES MÁS QUE EL RITMO ANUAL DE ENDEUDAMIENTO ENTRE EL 2004 y 2012, PERÍODO DURANTE EL CUAL, 4 DE CADA 5 NUEVOS EMPLEOS FUERON ASALARIADOS DEL SECTOR PRIVADO.
Hay otros síntomas claros de la “crisis de chen chen”, producto de la caída de la inversión privada desde el 2019.
En 5 años (2019-2024) la Provincia de Panamá, que aporta 36% de la fuerza laboral del país, perdió 97,478 empleos, 12.3% de su fuerza laboral.
Por otro lado, el Metro y Metro Bus transportaron 197,528 pasajeros DIARIOS menos que en el 2019, una caída del 23%.
La tendencia fue agravada por el cierre minero y la consecuente pérdida del Grado de Inversión, que originó un aumento en las tasas de interés, que ocasionó la eliminación de 6,636 empleos en el sector financiero y de seguros entre agosto 2023 y octubre 2024, con un salario mensual promedio de $1,156.30, $422 superior a la media salarial en la economía ($734.01) a octubre 2024.
De hecho, en esos 14 meses, la ciudad de Panamá perdió 27% de sus trabajadores formales del sector financiero y seguros.
Hay una relación DIRECTA entre la inversión privada y el endeudamiento externo.
Hemos hipotecado la economía para financiar funcionarios e informales, afirma Quevedo.
La generación de empleos tiene que ser la OBSESIÓN NACIONAL, por lo que urge transmitir confianza de que invertir en Panamá es buen negocio, ya que sin empleos no hay pensiones, y sin inversión privada seguiremos generando informales y funcionarios, con plata prestada