Enfoque Global

En limbo legal refugiados Centroamericanos

La caravana de migrantes que salió de Centroamérica a mediados de marzo llegó este domingo a la frontera entre México y Estados Unidos, donde algunos de sus integrantes intentarán obtener asilo en el país del norte.

La caravana, que partió a mediados de marzo de Tapachula, en el sur de México, llegaba así a su tramo final.

A los caminantes hondureños en el camino se les unieron refugiados de El Salvador, Nicaragua y Guatemala.

Todos ellos dicen haber sufrido amenazas de pandillas, violaciones, asesinatos de familiares o persecución política, por lo cual buscan asilo en otro país.

La meta de muchos era llegar a México, pero otros intentarán pedir asilo en Estados Unidos.

De las 2.000 personas que comenzaron la marcha, unos 300 llegaron a la frontera, de los cuales entre 150 y 200 esperan hablar con las autoridades estadounidenses para solicitar el asilo.

La caravana puso en alertaal presidente Trump, quien ordenó desplegar la Guardia Nacional en la frontera para apoyar las misiones de seguridad fronteriza.

Los voluntarios que acompañan a los migrantes insisten en que es un derecho legal solicitar asilo en un puerto de entrada a Estados Unidos.

“Dejen de rechazar a los solicitantes de asilo, ¡no están violando la ley!”, exclamó Nicole Ramos, abogada de la organización Al otro lado, que ha ofrecido asesoría legal a los integrantes de la caravana.

Tras el rechazo inicial de las autoridades mexicanas a dejarles avanzar, un grupo de unos 50 migrantes pudieron caminar hasta la zona controlada por Estados Unidos.

Sin embargo, el servicio estadounidense de aduanas y control de fronteras (CBP, por sus siglas en inglés) comunicó que por falta de capacidad, no podrá atender todas las solicitudes de asilo de golpe.

Esto hace que los migrantes queden en un limbo del que no se sabe cuándo saldrán.