Enfoque Global

Cómo paga Corea del Norte su sofisticado programa militar

El “reino ermitaño” de Corea del Norte es un crisol de contradicciones.

Es vecino de varias de las economías más dinámicas del mundo, incluyendo a la próspera Corea del Sur, pero su población ha pasado hambre en épocas recientes.

A mediados del siglo XX era uno de los países más industrializados de Asia, pero hoy es visto como un desastre económico.

Mientras las condiciones de vida de sus ciudadanos son precarias, el gobierno mantiene confrontaciones con Estados Unidos y la comunidad internacional por el avance de su programa nuclear y de desarrollo de misiles de largo alcance.

En medio de la tensión creciente, el sábado Corea del Norte conmemoró el 105 aniversario del nacimiento de Kim il-Sung, fundador de la nación y “presidente eterno”, con un enorme desfile militar en Pyongyang.

El acto, que pareció exhibir nuevos misiles balísticos intercontinentales y submarinos armados, fue considerado una deliberada muestra de la fuerza militar norcoreana.

Además, al día siguiente, Corea del Norte intentó lanzar un misil desde su costa este, según informaron Corea del Sur y EE.UU.

Aunque este último ensayo falló, ya que el misil explotó casi inmediatamente, Corea del Norte ya ha llevado a cabo en los últimos años cinco pruebas nucleares y una serie de lanzamientos de misiles exitosos.

Se cree que Corea del Norte tiene más de 1.000 misiles de distintas capacidades, incluyendo unos de largo alcance, que podrían llegar a EE.UU.

Son muy pocas las naciones de la Tierra que pueden desarrollar estas avanzadas y costosísimas tecnologías, lo que lleva a algunos a preguntarse cómo financia Pyongyang estas actividades.

Exportación e inversión

En primer lugar, se requieren divisas extranjeras. Muchos están de acuerdo en que Corea del Norte ha hecho importantes adquisiciones foráneas de tecnología, en ciertos casos con fines militares.