Docentes exigen pago de salarios atrasados y denuncian pésima condición de algunos colegios
Javier Collins Agnew / La Verdad Panamá
El dirigente magisterial Humberto Montero del Frente Nacional Educadores Independientes (Frenei), reveló que los gremios de educadores reclamaron a la ministra de Educación Lucy Molinar el pago de salarios atrasados a miles de docentes y la pronta reparación de algunas escuelas que se encuentran en pésimas condiciones.
Eso se dio durante una reunión que sostuvieron con la ministra de educación Lucy Molinar, encuentro que según Montero fue “muy positivo” tras abordarse temas de gran importancia para el sector educativo.
En el encuentro participaron, además de la ministra, directivos clave como el director general, la directora encargada de Recursos Humanos, el director de Perfeccionamiento, el área de Asesoría Legal y el director Administrativo.
Montero destacó la presencia de 23 gremios magisteriales en la reunión, quienes presentaron un documento de 13 puntos entregado el pasado 13 de noviembre.
Este documento contiene las principales preocupaciones y propuestas del sector educativo. Según explicó, la reunión permitió avanzar en varios aspectos, estableciendo una sinergia que será clave para abordar los temas pendientes en las próximas reuniones, la siguiente programada para el 7 de febrero.
Pagos pendientes y vigencias expiradas
Uno de los puntos principales tratados fue el cumplimiento de los pagos atrasados a los docentes. Según Montero, la ministra Molinar informó que el Ministerio de Educación ha desembolsado más de 28 millones de dólares a 36,671 educadores.
Sin embargo, el dirigente señaló que aún existen casos pendientes, particularmente en la categoría de prima de antigüedad, décimo tercer mes y compensaciones a docentes en áreas de difícil acceso.
Montero denunció que muchos docentes aún no han recibido los pagos correspondientes y, en algunos casos, solo se ha abonado la mitad del monto. Además, subrayó que algunos educadores que ingresaron en marzo del año pasado solo comenzaron a recibir salarios en septiembre, quedando pendiente el pago de los meses de marzo a agosto.
“Es importante que se cumpla con los pagos a los docentes, ya que esto afecta directamente su estabilidad económica y su capacidad para desempeñar su labor. No se trata solo de una deuda financiera, sino de un reconocimiento al esfuerzo de los educadores”, afirmó Montero.
Condiciones de los centros educativos
Otro tema abordado fue el estado de los centros educativos. Montero expresó preocupación por la infraestructura deficiente de muchas escuelas en el país, señalando que todavía existen “escuelas rancho”, locales alquilados y centros educativos sin laboratorios de informática ni conexión a internet.
“Es inaceptable que en pleno siglo XXI tengamos escuelas en condiciones deplorables. No podemos ofrecer una educación de calidad si los docentes y estudiantes trabajan en ambientes inseguros y sin los recursos básicos”, aseguró.
El dirigente también cuestionó la planificación de las capacitaciones tecnológicas para los docentes, previstas del 3 al 21 de febrero, debido a la falta de infraestructura adecuada y la exigencia de que los educadores utilicen sus propias computadoras.
“No podemos exigirle a un docente que se capacite si ni siquiera cuenta con las herramientas básicas en su centro de trabajo. Esto es una muestra de la desconexión entre las políticas educativas y la realidad en el terreno”, enfatizó.
Próximos pasos
Montero reiteró el compromiso de los gremios magisteriales de trabajar en conjunto con el Ministerio de Educación para mejorar las condiciones del sistema educativo. La próxima reunión, programada para el 7 de febrero, buscará finiquitar los temas de pagos pendientes y avanzar en la discusión sobre la infraestructura escolar.
“Nos mantenemos firmes en nuestra postura de velar por los derechos de los educadores y de los estudiantes. Aunque reconocemos los avances logrados, aún queda mucho por hacer. No descansaremos hasta que se cumpla con las condiciones necesarias para garantizar una educación de calidad en Panamá”, concluyó Montero.