Economía nacional en cuidados intensivos: Se han perdido 54 mil empleos formales en el área urbana
Mileyka Valdespino / La Verdad Panamá
La economía panameña enfrenta uno de los períodos más críticos de las últimas décadas, marcado por un aumento del desempleo, la pérdida de empleos formales y un desplome en la confianza de inversores nacionales y extranjeros. Estos problemas han sido expuestos por recientes informes del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC) y la calificadora Fitch Ratings.
El consultor laboral e ingeniero René Quevedo reveló cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC), que nos ponen a reflexionar acerca de la gravedad de la economía nacional. Una tasa de desempleo que aumentó a 9.5% junto con una alarmante pérdida de 54,000 empleos formales no agrícolas en los últimos 14 meses. Quevedo calificó esta cifra como “absolutamente contundente”, subrayando que representa la mayor contracción de empleo formal desde la pandemia.
Uno de los factores determinantes detrás de esta crisis es el cierre de Minera Panamá, que según cifras del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel) impactó directamente en 31,413 empleos y contribuyó al aumento del 1.5% en la tasa de desempleo. Quevedo enfatizó que las consecuencias del cierre se extienden a 22 sectores económicos, exacerbando la pérdida de empleos formales y afectando severamente la economía urbana.
“El empleo formal es aquel que cotiza a la Caja de Seguro Social (CSS), y su caída tiene un efecto devastador en un momento donde el sistema enfrenta una crisis de sostenibilidad,” destacó Quevedo. Añadió que, sin generación de empleo formal, la CSS está condenada a la quiebra.
El especialista recordó con preocupación la finalización de los trabajos de ampliación del Canal de Panamá en 2016. En aquel entonces, el Banco Mundial advirtió que la economía sufriría una desaceleración y recomendó implementar programas de capacitación para reubicar a los trabajadores afectados. Sin embargo, estas recomendaciones nunca se ejecutaron, lo que resultó en la pérdida de 62,000 empleos formales en cinco años.
“Lo que vivimos ahora con la mina ya había sido advertido, pero nuevamente no se actuó a tiempo. Ahora enfrentamos un escenario similar, pero sin el soporte de inversión extranjera que mitigó el impacto tras la ampliación del Canal,” explicó Quevedo. El ingeniero subrayó que la clave para revertir esta situación es recuperar la confianza en el país. “Sin confianza, no hay inversión privada; sin inversión privada, no hay generación de empleo formal. Es un círculo vicioso que debemos romper,” afirmó.
Quevedo señaló que, en el período posterior a la ampliación del Canal, Panamá atrajo inversiones extranjeras anuales de hasta 4,400 millones de dólares. En contraste, actualmente la inversión extranjera ha colapsado a niveles alarmantes, afectando sectores estratégicos como la logística y el turismo, donde la informalidad laboral supera el 60%.
“El potencial económico de Panamá es enorme, pero sin inversión, ese potencial es una ilusión. Necesitamos medidas concretas y urgentes para demostrar que invertir en Panamá es un buen negocio,” expresó.
Otro tema central de la discusión fue la reforma al sistema de pensiones del programa de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM). Según proyecciones del Ministerio de Economía y Finanzas, si no se aprueban las reformas necesarias, en 2025 no habrá fondos suficientes para pagar las pensiones y jubilaciones.
“Estamos en una carrera contra el tiempo. Este no es un problema de calle arriba y calle abajo, es una realidad matemática que debemos enfrentar con datos y soluciones concretas. Postergar las decisiones solo agravará la crisis,” advirtió Quevedo.
El panorama laboral también se vio reflejado en la reciente feria de empleo organizada por Mitradel y Konzerta. Aunque se ofrecieron solo 3,000 vacantes, más de 100,000 personas acudieron en busca de trabajo, una señal clara de la desesperación y la falta de oportunidades.
“Este evento es el reflejo más claro de la crisis laboral que vive el país. Necesitamos soluciones inmediatas para frenar esta caída, y esas soluciones deben venir de la reactivación económica y la generación de empleos formales,” concluyó Quevedo.
El especialista instó a las autoridades, empresarios y ciudadanos a trabajar juntos para superar la crisis. “Cualquier propuesta debe cumplir dos requisitos: aumentar la generación de empleo formal privado y garantizar que esto se logre en un país en paz. El proceso es tan importante como el resultado,” enfatizó.
Quevedo señaló que, aunque el reto es monumental, Panamá tiene los recursos y el potencial para salir adelante. Sin embargo, advirtió que el tiempo es limitado y que cualquier demora podría tener consecuencias irreparables.