El canciller chino habla con sus homólogos iraní y turco sobre cómo evitar una tragedia en Gaza
Las conversaciones se suman a la ronda de llamadas que ha mantenido en los últimos días el jefe de la diplomacia china con representantes de las partes implicadas, de los países de la región y de Estados Unidos.
“La prioridad en este momento es desescalar la situación para evitar una grave catástrofe humanitaria en Gaza y la muerte de más civiles inocentes antes de que ello ponga aún más en peligro el proceso de paz en Oriente Medio”, afirmó Wang, según la agencia oficial Xinhua.
En su llamada con el canciller iraní, Hosein Amir Abdolahian, el diplomático chino sostuvo que el derecho a la defensa propia debe cumplir las leyes internacionales humanitarias y que responder a la violencia con más violencia solo causará más daño y traerá crisis “más serias”.
Wang transmitió a su homólogo iraní el apoyo chino a los países islámicos en el refuerzo de su unidad para que “hablen con una sola voz sobre la cuestión palestina”.
También consideró que la causa fundamental de la situación actual es que el derecho del pueblo palestino a tener un Estado, su derecho a la existencia y su derecho al retorno se han pospuesto e ignorado “durante demasiado tiempo”.
China “continuará del lado de la paz y la justicia y apoyará la causa justa del pueblo palestino en salvaguardar sus derechos nacionales”, agregó, a la vez que reiteró su defensa de la solución de los ‘dos Estados’.
El diplomático chino se expresó en términos similares durante su llamada con el ministro turco, Hakan Fidan.
Mientras, el jefe de la diplomacia iraní dijo a Wang que su país espera resolver la crisis por la vía política y que está dispuesto, para ello, a fortalecer la comunicación con China.
Por su parte el titular turco de Exteriores subrayó la opinión de Turquía de que es necesario poner fin a las víctimas civiles y al desplazamiento de personas.
Fidan consideró que es “imperativo” lograr un alto el fuego, que cualquier solución que no incluya la de los ‘dos Estados” es inviable y añadió que su país “no acepta las medidas punitivas impuestas por Israel” a los civiles de Gaza.
Este sábado se cumplió una semana del conflicto entre Israel y el grupo islamista Hamás, que deja ya al menos 2.215 muertos y 8.714 heridos en la Franja de Gaza, además de una crisis humanitaria por los bombardeos de Israel tras el ataque sin precedentes de Hamás en suelo israelí, que causó más de 1.300 muertos, la mayoría civiles, y al menos 120 secuestrados.