El mortal ataque contra una base militar de Siria por el que Rusia y Bashar al Asad acusan a Israel
Los gobiernos de Siria y Rusia responsabilizaron a Israel por el mortal ataque de este lunes por la mañana en contra de un aeropuerto militar sirio.
Varios misiles impactaron la base aérea de Tiyas, conocida como T4, cerca de la ciudad de Homs. Según observadores, 14 personas murieron en la acción.
Israel, que ya ha atacado blancos sirios en el pasado, no ha confirmado ni negado las acusaciones. E inicialmente Siria había acusado a EE.UU. por el ataque.
Después de todo, el incidente se produce en medio de la alarma internacional por un supuesto ataque con armas químicas en contra de una localidad en poder de los rebeldes que luchan contra el gobierno de Bashar al Asad.
Y tanto EE.UU. como Francia habían amenazado con responder.
El presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió que habría “un elevado precio a pagar” por el supuesto ataque químico contra Douma, en la región de Guta Oriental, cerca de Damasco.
Y en un mensaje publicado en Twitter, el mandatario estadounidense también calificó a Asad de “animal”.
Por lo pronto, según la televisión estatal siria, los últimos combatientes rebeldes en Douma ya se rindieron y están abandonando el enclave a bordo de autobuses luego de haber alcanzado un acuerdo con el gobierno de Asad.
Las posibles razones de Israel
Una fuente militar siria citada por la agencia estatal de noticias Sana reportó que las defensas antiaéreas habían repelido un ataque de misiles israelís contra T4.
Según la fuente, los misiles fueron disparados desde el espacio aéreo de Líbano por aviones israelíes F15.
El ministro de defensa ruso, por su parte, dijo que de ocho misiles disparados cinco fueron interceptados y tres impactaron la parte oeste del aeródromo.
Israel rara vez reconoce este tipo de operaciones, pero ya ha admitido haber atacado decenas de objetivos en Siria en el pasado.
Y su mayor ataque aéreo contra Siria, en febrero de este año, incluyó la base aérea T4, luego de la incursión de un dron israelí en territorio israelí y el derribo de una caza F16 israelí por parte de las defensas antiaéreas sirias.
Israel ya ha dicho que no permitirá que Irán establezca bases en Siria para operar desde ahí.
Y el ejército israelí sostiene que la Guardia Revolucionaria de Irán lleva tiempo activa en la base T4 y la utiliza para hacer llegar armas a grupos como Hezbolá, un enemigo declarado de Israel.
Situación complicada
Mientras, a pesar de que Francia y EE.UU. dijeron el domingo que iban a “coordinar una respuesta conjunta decidida” al supuesto ataque químico en Guta, funcionarios estadounidenses afirmaron que Washington no había ordenado ningún bombardeo en Siria.
“Es este momento, el Departamento de Defensa no está conduciendo ataques aéreos en Siria”, aseguró el Pentágono en un comunicado. Francia también negó cualquier participación en la operación.
Según Marcus, cualquier operación israelí habría sido monitoreada de cerca por los radares de las defensas antiaéreas rusas en Siria.
“También hay una línea directa entre los israelíes y los cuarteles generales de Rusia en Siria. Pero, hasta el momento, Rusia no ha hecho nada para interferir con las operaciones aéreas de Israel”, destacó el corresponsal.
“Pero la presencia de defensas antiaéreas rusas en Siria ciertamente complica la ecuación estratégica mientras Occidente pondera su respuesta al reciente ataque químico”, reconoció.
Se espera que el Consejo de Seguridad de la ONU se reúna este lunes para discutir lo ocurrido en Douma.