Enfoque Global

Europa y el temor por el Islam

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Por Lester Burton

Los conflictos que vienen afectando a las tierras del Medio Oriente son más antiguos de lo que muchos piensan. Estamos hablando de países con estructuras políticas muy complejas. Todavía en Occidente – es decir los que estamos de este lado del mundo- nos preguntamos cómo es posible que todas estas tierras cobijadas por la misma religión que es el Islam tengan diferencias de opinión tan marcadas y que han ocasionado tanta muerte y destrucción durante  generaciones.

Si bien es cierto la mayoría de los países árabes son musulmanes los criterios de sus gobiernos son muy diferentes ya que cada uno interpreta y aplica la religión del Islam a su manera. Subtítulo. Así pues en Arabia Saudita cuentan con una monarquía absoluta en donde una sola familia decide que se hace, que se lee y que se dice. En Egipto aunque es una república islámica sus jefes de estado siempre han sido militares y en un país en donde el 46% de la población depende de las empresas militares las cosas salen a golpe de cuarteles.

Si vemos el caso Irán nos encontramos con el ala más cerrada del Islam – los chiíes- que gobiernan bajo le ley musulmana conocida como Sharia.

Cuando hablamos de los emiratos la situación es similar; los únicos que están un poco más occidentalizados son Turquía y Marruecos en donde aunque los controles a los derechos humanos son fuertes sus gobiernos evitan dar ante el mundo una imagen de autoritarios.

Tanto Turquía como Marruecos tienen relaciones más especiales con Europa, el primero lleva más de 60 años intentando formar parte de la Unión Europea y el segundo tiene frontera con España.

Los europeos no están con muchas ganas de hacer equipo con los países musulmanes y aunque hacen sus negocios por “obligación” a la hora de dar pasos concretos para buscar acercamientos, la burocracia se encarga de dejarlo bajo la mesa.

En la actualidad en toda la Unión existe una especie de psicosis ante todo lo que tenga que ver con los musulmanes.  En Reino Unido, Francia y España  son constantes las marchas y manifestaciones que buscan frenar el rápido crecimiento de simpatizantes esta religión.

Así las cosas, los musulmanes europeos se siente acosados cada día y señalan que prácticamente se ha hecho imposible salir a las calles sin que reciban gritos e insultos. A todo esto se suma el creciente número de occidentales que viajan a Siria para integrar las filas del grupo terrorista Estado Islámico. Europa ya sabe que tiene un problema y es el hecho de que muchos de los descendientes de los musulmanes que llegaron hace algunos años y que son nacidos en suelo europeo no se sienten identificados con las costumbres occidentales.

Los nuevos musulmanes con pasaporte europeo se sienten más obligados a luchar por el Islam que por Europa y ese es realmente un serio problema porque estamos hablando de nuevos terroristas que han nacido y crecido en suelo europeo a los que no es fácil identificar.  Así las cosas el reto es grande y las autoridades saben que no lo tienen fácil porque están ante un enemigo que está más cerca de los que muchos piensan.

(Edición impresa abril)