Flexibilización de medidas puede provocar macro brotes del coronavirus
La Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá expresa mediante un comunicado su preocupación por la posibilidad de nuevos brotes o macro brotes al flexibilizar las medidas de mitigación y hace énfasis en el aeropuerto de Tocumen como fuente de nuevos casos importados una vez reinicie operaciones.
En el comunicado titulado: “La transición en la evolución de la pandemia de COVID-19. La perspectiva académica”, argumentan que en la medida que haya transmisión significativa de este virus, la posibilidad de que individuos que estén incubando la enfermedad, o que tengan un bajo nivel de infección sintomática, puedan llegar a comunidades que no tienen transmisión, es alta.
No se pueden flexibilizar las medidas de mitigación a la ciega. Necesitamos evidencias científicamente recolectadas para definir los riesgos de reintroducción del virus o de aumento de su transmisión, sostiene la academia.
Aeropuerto de Tocumen
La Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá señala que en nuestro país el virus llegó a través del Aeropuerto de Tocumen: “qué se va hacer para eliminar la posibilidad de casos importados por medio de vuelos internacionales? También en nuestra ciudad el virus se propagó a través de los medios de transporte público; 300,000 usuarios diarios del metro, viajando, enero, febrero y marzo sin distanciamiento social y sin mascarillas, qué medidas se piensan tomar para evitar estos mecanismos de propagación viral?”
En los meses de marzo a mayo – apunta la Facultad de Medicina- hemos visto con preocupación que Panamá es el segundo país de América Latina con la mayor mortalidad expresada en términos de cien mil habitantes (John Hopkins University), tiene una tasa de letalidad que se mantiene alrededor de 2.88 y tiene Rt calculado con un modelo en 1 y en 1.5 según un segundo modelo (Imperial College of London). Actualmente la pandemia afecta sobre todo los sectores más humildes dela ciudad capital y la Comarca Guna Yala.
“Comprendemos que la transición de la mitigación a la flexibilización de las medidas es profundamente complicada y que no hay una dinámica de implementación con validez universal. Globalmente se ha hecho énfasis en hacer pruebas en forma masiva para identificar a las personas con el virus, aislarlos y hacer la trazabilidad de los contactos para ponerlos en cuarentena. Tiene nuestro país la capacidad de hacer pruebas masivas al reabrir los sectores económicos? ¿Tiene el país los mecanismos para lograr la trazabilidad de los contactos? ¿Cómo se va a proteger a los trabajadores en las empresas?”
El pueblo de Panamá no ha delegado las decisiones que implican vida o muerte, salud o enfermedad a ninguna persona o grupo de personas en particular, finaliza diciendo el comunicado que lleva la firma del doctor Enrique Mendoza, decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá.