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Harriet Dyer & Patrick Brammall de “Colin from Accounts” en exclusiva para La Verdad Panamá

En entrevista exclusiva para La Verdad Panamá Harriet Dyer & Patrick Brammall nos contaron sobre la segunda temporada de “Colin from Accounts”, disponible desde el 6 de diciembre por Universal +

  1. Harriet, ¿Es verdad que escribiste el capítulo piloto de la serie en cuatro días?

Harriety Dyer: Sí, el primer día me mentalicé que tenía que escribir algo, y de martes a viernes lo hice.

Patrick Brammall: Así lo hizo, estaba escribiendo de manera graciosa fervorosamente. En la primera temporada, hay una escena en la que su personaje va al baño y el inodoro deja de funcionar, y le pasó algo parecido mientras estaba escribiendo el piloto de la serie y se le ocurrió incluirlo.

  1. ¿Qué se te vino a la mente primero para escribir: una escena o los personajes?

Harriet Dyer: Lo primero fue el concepto de dos personas que tenían química y que compartían un problema, estábamos interesados en eso. Y, por supuesto, tenía que tener un perro, todos aman a los perros, nosotros amamos a los perros, y pensamos en utilizar esa ternura que generan en una serie.

Patrick Brammall: Harriet le tenía alergia a la idea de crear una serie demasiado tierna con un perrito, todo el tiempo lo decía. En un momento, mientras estábamos trabajando en la primera temporada, apreció con fiebre y dijo: “No atropellemos a un perro sino a una anciana”. Yo estuve de acuerdo, se lo dijimos a los productores y lo aceptaron y luego pensamos que era una idea ridícula y que no lo íbamos a hacer.

  1. Los “meet-cute” son esenciales para el género de la comedia romántica y el de esta serie es perfecto, ¿Cómo fue la respuesta de los ejecutivos cuando les contaron que Ashley atropellaba a un perro, cómo reaccionaron?

 Patrick Brammall: Esa era la idea inicial que planteamos, todo comenzaba de ese modo.

Harriet Dyer: En un momento pensé que la serie no se iba a hacer, así que escribí cosas pensando que no iba a tener que hacerlas. Con respecto al “meet-cute”, pensamos en darle complejidad a ese encuentro. Son dos personajes que se sienten atraídos, pero que piensan que no se van a ver nunca más. Luego, tienen que sentarse juntos en un viaje a la veterinaria, algo muy real.

Patrick Brammall: Queríamos mostrar cómo esas dos personas no se hubiesen podido conocer en otra circunstancia, que tienen un problema en común. Ese momento de la primera temporada es como el big bang de la serie, todo está contenido allí, es eso lo que genera el resto de los eventos.

  1. Ustedes están casados, ¿Cómo fue su primer encuentro como pareja en la vida real y cómo se compara con el de la ficción?

Harriet Dyer: Yo era mesera en un bar y a Patrick lo reconocí por un comercial, muy diferente todo a la serie. Él tenía mucha barba y yo pensaba que era muy gracioso, y sabía que él había firmado con mi mismo agente, así que sí, nos conocimos en un café.

  1. ¿Cuánto de este ida y vuelta que tienen se ve en la serie?

Patrick Brammall: Bastante. Lo que hace que Ashley y Gordon se unan y sigan juntos es que están en la misma frecuencia, esa es la idea. Supongo que tomamos eso de nuestras vidas, en cierta forma. Mucha gente que ve el programa piensa que está mirando detrás de la cortina y en cierta forma es así, porque nosotros le ponemos el cuerpo, pero hay una amplia dosis de ficción que es tomada de nuestros amigos y de situaciones que nos hacen reír. No somos nosotros, pero si a la gente le gusta pensar eso, está perfecto.

  1. ¿Les preocupaba si se iba a traducir en pantalla su dinámica o si les iba a jugar en contra?

Harriet Dyer: Sí, nos preocupaba, porque era muy posible, ya que teníamos la presión de ser los únicos guionistas, los productores ejecutivos, teníamos un bebé cuando se filmó la primera temporada, estaban pasando muchas cosas, así que fue un milagro lo que se logró entre decir “acción” y “corten”.

  1. ¿Cómo trabajan juntos cuando escriben? ¿Cómo es el proceso creativo?

Patrick Brammall: Trabajamos juntos en todo, ahora estamos trabajando en la tercera temporada, nadie lo pidió, pero nos sentimos confiados. Nos sentamos y tiramos ideas, planeamos algunas cosas, pensamos qué cosas serían divertidas o interesantes. Tenemos dos “estrellas del Norte” cuando escribimos: tiene que ser divertido y tiene que ser real. Pasamos todo por ese filtro y también escribimos cosas que no hayamos visto antes, todo eso lo hacemos juntos, lo planeamos en detalle, nos vamos pasando los guiones, es todo compartido. Pero sí nos dividimos los capítulos para poder llevarlos a cabo.

  1. ¿Cuáles son las fortalezas de cada uno?

Harriet Dyer: Patrick es muy gracioso, muy bueno para escribir historias, pero como productor me impresiona también, hace que todos se sientan escuchados, es muy hermoso de ver. Es como un mago, todos piensan que es un gran hombre.

Patrick Brammall: Tú eres una gran escritora, eres excelente con las historias.

  1. ¿Cómo abordan en la segunda temporada los tropos de la comedia romántica para que la audiencia sienta que nunca vio esas situaciones antes?

 Harriet Dyer: Sabíamos que teníamos que tener al perro de regreso, pero no dedicarle a eso más de un episodio, y en cuanto a los tropos, en la primera temporada la temática es si ellos terminarán juntos, y en la segunda planteamos si deberían haberlo hecho.

Patrick Brammall: Ahora que están juntos, que se miran, ¿qué van a hacer? Tienen mucho bagaje, especialmente Gordon, entonces hay muchos secretos que Ashley empieza a descubrir. Decidimos ir por eso, por lo divertido.

Harriet Dyer: Sí, nos enfocamos mucho en cómo Ashley se pregunta con quién está viviendo y por qué hace lo que hace.

  1. La segunda temporada es más experimental, el tono cambia, ¿qué querían lograr?

Harriet Dyer: Queríamos que fuera más desordenada, yo amo la serie “Normal People” y también me había gustado mucho el libro. En cuanto al tono, es algo completamente diferente, pero amo cómo los personajes no dejan de estar en la vida del otro, eso siempre lo planteaba cuando escribíamos, es un tema muy común. En esta serie, ellos comparten la misma mentalidad.

Patrick Brammall: Sí, el hecho de estar siempre en la misma frecuencia es lo que los salva todo el tiempo. Queríamos mostrar los obstáculos reales que podían tener, y por eso en la segunda temporada está la familia de Gordon, a quien Ashley ve diferente cuando está con ellos, y por eso se pregunta si le sigue atrayendo porque él se comporta como un niño. Queremos siempre crear historias reales que resuenen con la gente.

  1. ¿Podemos hablar del perro y cómo fue elegirlo?

Harriet Dyer: Es tan tranquilo, es muy bueno. Dicen que no tienes que trabajar con niños o animales, pero él es tan buen chico, los niños son terribles, pero él es genial.

Patrick Brammall: En la primera temporada sólo teníamos la idea de que un perro se escapaba de la puerta, y un libro con fotos de perros, y había muchos elegantes, pero elegimos a este Border Terrier, porque tiene una cualidad que es ser muy real, que era lo que queríamos.

  1. ¿La serie siempre se iba a titular “Colin from Accounts”?

Patrick Brammall: Teníamos un título tentativo que era “Dog with Wheels”, pero después elegimos “Colin from Accounts”, lo que confunde un poco a la audiencia, porque pueden pensar que está hablando de un hombre y que es una workplace sitcom.

  1. Harriet, tú eres muy organizada, ¿Cuál es el plan para esta historia?

Harriet Dyer: A los australianos no nos gusta estirar las cosas, puede que hagamos cuatro temporadas y terminemos. Esta serie fue creada desde el amor y con amor, y queremos dejar la tercera temporada en un lugar en el que podamos seguir, pero si eso no pasa, de todos modos estaremos felices. En la segunda temporada trabajamos durante 15 meses y eso está bien, pero hay momentos en los que sabemos que no podemos seguir para siempre, y además podemos hacer algo nuevo, habrá cosas nuevas. Nuestro impulso es dejar a la audiencia queriendo más.

Patrick Brammall: De hecho, yo ya tengo la última escena en mente.