Panamá: Un Consejo de Seguridad con una voz renovada de historia hacia nuevos retos siglo XXI
Dr. Edwin Cuevas Rodríguez
Diplomático de Carrera, Profesor y Panameño
El Consejo de Seguridad del 15 de marzo de 1973 fue un evento crucial en la historia de las relaciones entre Estados Unidos y Panamá, ya que marcó un punto de inflexión en la relación entre los dos países. La resolución, que fue aprobada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, pedía el retiro inmediato de las fuerzas militares estadounidenses de la Zona del Canal de Panamá y la devolución del canal al control panameño. Esta decisión tuvo implicaciones de gran alcance para ambos países y sus políticas exteriores. ya que marcó el final de un largo período de tensión y conflicto entre los dos países.
También bajo la ponencia del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se celebró una reunión para discutir el conflicto entre Israel y Egipto. Reunión significativa por varias razones, incluyendo el papel jugado por Panamá, como miembro no permanente del Consejo de Seguridad en ese momento. Su representante, el embajador Aquilino Boyd, propuso una resolución pidiendo un alto el fuego inmediato y la retirada de las fuerzas israelíes del territorio egipcio. Esta resolución finalmente fue adoptada por el Consejo de Seguridad, marcando una importante victoria diplomática para Panamá.
Panamá en el proceso y su impacto en la lucha revolucionaria, hacíamos historia en Mayúscula…
Los embates y diretes en el consejo no fueron del todo fácil, una resolución, allanó el camino para la firma de los Tratados Torrijos-Carter en 1977, que estableció un marco para la transferencia del Canal de Panamá al mando de profesionales panameños y la eventual retirada de las fuerzas militares estadounidenses del país.
La actuación de Panamá fue vista como una gran victoria para el nacionalismo panameño y ayudó a mejorar la posición del país en la comunidad internacional.
Sin embargo, la resolución también tuvo un impacto significativo en la política exterior de EE. UU., ya que marcó un cambio de la política tradicional de intervencionismo hacia un enfoque más multilateral de las relaciones internacionales. La decisión de retirar las fuerzas militares estadounidenses de la Zona del Canal de Panamá fue vista como un símbolo de la voluntad de Estados Unidos de respetar la soberanía de otras naciones y trabajar por un orden mundial más pacífico y cooperativo.
En el Panamá de hoy se anunció recientemente su candidatura a un puesto no permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) para el período 2023-2024. Paso significativo para Panamá, que durante mucho tiempo ha sido un defensor del multilateralismo y la cooperación internacional. De ser elegido, Panamá tendría la oportunidad de contribuir a la paz y la seguridad mundiales que resolvería los problemas y desafíos más apremiantes del siglo XXI; al mismo tiempo que obtendría una mayor visibilidad e influencia en el escenario mundial.
Es un movimiento inteligente que un país tan chico y corazón tan grande, que desde su estratégica posición geográfica, su salida a ambos mares y su historia e idiosincrasia basada en el multilateralismo, pueda ostentar posiciones importantes para el país, para la región y para su gente en busca de ese bien común que todos los estados latinoamericanos anhelamos.
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