Pionyang censura declaraciones de Rubio en primera crítica a nuevo Gobierno de Trump
Seúl, 3 feb (EFE).- Corea del Norte condenó este lunes unas declaraciones del secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, por calificar en una entrevista al país asiático de “Estado canalla”, en lo que supone la primera crítica directa de Pionyang contra el nuevo Gobierno de Donald Trump.
“Las groseras y absurdas declaraciones de Rubio tan sólo muestran claramente la visión incorrecta de la nueva administración estadounidense sobre la República Popular Democrática de Corea (nombre oficial del país) y nunca ayudarán a promover los intereses de EE.UU. tal y como él desea”, añade el texto.
El comunicado, titulado “El país más depravado del mundo no tiene derecho a encararse con otros países” considera “absurdo e ilógico” que EE.UU. califique de “Estado canalla” a Corea del Norte.
Por su parte, el portavoz del Ministerio de Unificación surcoreano, Koo Byoung-sam, criticó a su vez en una rueda de prensa celebrada hoy el escrito norcoreano.
“Siendo claros; el que vulnera las reglas internacionales y amenaza la paz en la comunidad internacional es la propia Corea del Norte”, aseguró Koo, que subrayó que Seúl y Washington comparten el objetivo de la total desnuclearización de Pionyang.
El artículo supone la primera crítica directa del país asiático para con la nueva Administración del presidente Donald Trump, que dijo recientemente que trataría de contactar al líder norcoreano, Kim Jong-un, para reiniciar el diálogo sobre desarme.
Trump y Kim se reunieron en tres ocasiones entre 2018 y 2019, pero el rechazo de Washington a la oferta de desnuclearización planteada por Pionyang hizo descarrilar las negociaciones.
Por otra parte, KCNA publicó también hoy otro comunicado de Exteriores condenando el plan del nuevo Gobierno estadounidense para reforzar los sistemas de interceptación de misiles para territorios aliados.
Según este escrito el plan “es peligroso porque justifica el aumento de fuerzas militares con el pretexto de hacer frente a las ‘amenazas’ de los países enemigos, independientemente de su viabilidad”.
“El proyecto de modernización del sistema de defensa antimisiles de la actual administración estadounidense también tiene la meta de lograr las condiciones para realizar ataques nucleares preventivos contra sus adversarios sin temor a represalias por parte de países enemigos y también de militarizar el espacio, patrimonio común de toda la humanidad, para cimentar la hegemonía militar estadounidense a escala global”, concluye.