Privadas de libertad denuncian violaciones a su derecho a la salud y la vida
* Hacemos un llamado de Auxilio al Presidente Electo José Raúl Mulino
Javier Collins Agnew
La Verdad Panamá
Privadas de libertad del Centro Femenino de Rehabilitación (Cefere), emitieron un comunicado en donde denunciaron serias violaciones a su derecho a la salud y a la vida, ello ante la gran cantidad de internas que se encuentran sufriendo quebrantos de salud y que no son atendidas.
El documento al que tuvo acceso La Verdad Panamá es una petición desesperada de auxilio debido a las condiciones de vida y salud de las mujeres privadas de libertad que están en una crisis insoportable.
“La violación de nuestros derechos fundamentales al bienestar y a la atención médica adecuada es una realidad diaria que enfrentamos, una crisis de salud que atravesamos y que ha sido minimizada por las autoridades”, sostiene.
Las privadas denunciaron la falta de acceso a servicios médicos básicos y la escasez de medicamentos esenciales, incluso para afrontar afecciones comunes como la influenza o síntomas de COVID-19, problemas críticos que dicen ponen en riesgo sus vidas.
Señalan que hay restricciones impuestas por la policía, que les impide recibir medicamentos y otros suministros médicos de parte de familiares, situación que agrava el problema.
En su carta las internas hablan del hacinamiento extremo en el que viven, un mal que facilita la propagación de enfermedades y agrava las condiciones de quienes ya padecen afecciones graves, como el VIH y enfermedades pulmonares.
Según las privadas de libertad, existe una complicidad entre los funcionarios, lo que impide una supervisión imparcial de tal forma se realicen cambios significativos en el Cefere.
En la carta hacen un llamado al presidente electo, José Raúl Mulino, para que se comprometa a realizar una intervención inmediata que priorice la salud y la dignidad de las internas del Cefere.
Es necesario que se brinde de manera inmediata una atención médica adecuada, medicamentos esenciales, y se facilite la entrada de suministros médicos para atender no solo las necesidades básicas, sino también los casos de enfermedades graves dentro de la población carcelaria femenina, señalan.