Producción de cocaína marca un récord y el consumo repunta tras la pandemia
Viena, 27 jun (EFE).- La producción de cocaína alcanzó récords históricos en 2020 y la ONU advierte del repunte de su uso tras un descenso durante la pandemia del covid, debido a que los confinamientos limitaron los ambientes sociales en los que suele consumirse esta droga.
Según el Informe Mundial sobre Drogas de 2022, publicado este lunes por la Oficina de Naciones Unidas para la Droga y el Delito (Onudd), 21,5 millones de personas consumieron cocaína en 2020, es decir, el 0,4 % de la población mundial entre 15 y 64 años.
La pandemia del covid supuso un parón momentáneo en una tendencia al alza que había elevado el número de consumidores un 32 % entre 2010 y 2020, un aumento que se explica en parte por el crecimiento de la población mundial.
“Es probable que el consumo ocasional de cocaína, a menudo vinculado a actividades recreativas, se viera afectado por la pandemia de covid-19 y las consiguientes medidas de distancia social”, señala el informe en relación a la tendencia en Europa, uno de las principales regiones de consumo.
La Onudd afirma que existen indicios de que el consumo está repuntando tras ese paréntesis.
Lo cierto es que la producción alcanzó en 2020 un máximo histórico de 1.982 toneladas, un 11 % más que el año anterior.
Ese récord se batió pese a que el área global de cultivos apenas cambió en 2020, de hecho fue un 5 % menor que en 2018.
La caída de hectáreas cultivadas en Colombia (7 %) fue compensada con creces por los aumentos en Perú (13 %) y Bolivia 15 %), según el reporte.
Con todo, Colombia, con un 61 % del total, siguió siendo el país del mundo con la mayor proporción de arbustos de coca.
El informe hace una mención especial al resultado de las diferentes estrategias para erradicar los cultivos.
Aunque la eliminación forzosa provoca un inicial descenso de los cultivos, este aumenta luego a un ritmo mayor que en zonas donde la erradicación se aplicó implantando productos alternativos.
Según la ONU, a largo plazo “los cultivos ilícitos disminuyeron en mayor medida en las zonas con erradicación voluntaria y desarrollo alternativo”.
Los datos de incautaciones señalan que el tráfico se está expandiendo hacia África y Asia, más allá de los dos tradicionales grandes mercados en Europa y Norteamérica.
También en Sudamérica, donde se cultiva y desde donde se trafica gran parte de la cocaína, ha aumentado el consumo.
Se estima que en 2020, el 1,6 % de la población de la región entre 15 y 64 años probó esa droga, más del doble que el porcentaje registrado diez años antes.