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Segunda fase del diálogo no puede  darse  bajo imposiciones, sector productivo sigue esperando  respuesta a  sus condiciones

Redacción La Verdad Panamá

La presidenta  de Fedecámaras  y vocera  de la  Gran Alianza Nacional por Panamá, Alicia Jiménez señaló que pareciera  que prevalece   la imposición y no el   equilibrio  en la segunda  fase  del diálogo lo cual  genera  incertidumbre y no aporta  a  la solución  de los problemas  que  enfrenta el país.

En una entrevista ofrecida  al programa “Infórmate de la verdad” la profesora indicó  que hay  que ser coherentes, nadie  entra  a una mesa de negociación   24/8  en términos de   proporcionalidad eso hay que abordarlo, igual que los temas  que nosotros como sector empresarial productivo podemos aportar  y los  que las alianzas también propongan, pero debe ser mediante   acuerdos.

Sugerimos que en vez de iniciar  de todas maneras el 6 y el 7  de octubre  se pospusiera  y  que esos días nos sentáramos ambas partes  para consensuar  una  agenda de metodología de trabajo y eso no se dio porque pareciera que la imposición prevalece, en lugar   del equilibrio y el  diálogo, exclamó la dirigente.

Para  Fedecámaras  es fundamental  la revisión de los acuerdos  logrados  en la fase 1 del diálogo  de Penonomé, presentado  en su nota  a Monseñor  Ulloa  como  una de las condiciones  para incorporarse a la fase 2,  ya que no se han implementado  como    espera la ciudadanía. La rebaja  en los 72 productos de la canasta básica eso no se   ha dado  como  tampoco la rebaja de los medicamentos en un 30%  más  el 20%. Esto  no se  ha dado porque es  imposible  que se den rebajas  o acuerdos sin tomar en consideración a la parte que tiene que implementarlo y que conoce perfectamente cómo se  produce, se conforma, edifica  y construyen los precios  en los mercados.

Reconoció que existen imperfecciones en los mercados  que se pueden conversar, pero usted  no puede  tomar decisiones sin consultar  y es precisamente lo que sucedió  cuando de manera  bilateral  dos  de las  partes se ponen  de acuerdo, establecen un decreto  que dice “hágase esto…” nosotros somos  respetuosos de la ley, por lo tanto, lo más que se puede  hacer   es  no producir  o “no coloco el producto  porque yo no voy a perder y toda  empresa  tiene  derecho a  tener  su margen de  utilidad,   de lo contrario no existe  y esto es milenario  en toda  la humanidad”.

Si existen imperfecciones  en la parte de la cadena de  aprovisionamiento, entonces resolvamos  eso, pero ¿quién es  llamado a  resolver  ese  problema, el sector  que conforman  las alianzas, el gobierno  que es  receptor de impuestos  o es  el sector que conjuntamente con sus colaboradores   que es  el que genera la producción y los  impuestos  al Estado? Preguntó la dirigente, señalando de paso  de  que nunca han dicho que  estén divorciados, no,  necesitamos el uno del otro y eso debemos conservarlo.

Alicia Jiménez  expresó que el gobierno sabe exactamente   que  lo que   estamos  solicitando  no está tirado de los  cabellos y que  es una  parte  mínima requerida para  sentarnos a negociar. El gobierno sabe  que estamos  dispuestos a  entrar y sentarnos porque su representante ya tiene  en sus manos  nuestra  petición  al igual que la Iglesia  que es la facilitadora.

Argumentó  que la paz  social, además  de  evitar  el cierre  de calles, significa  también  el desempeño normal  de la empresa  privada  para    generar  empleos y disminuir esos  80 empleos  informales  que hay  en el país.

Cuando   una persona  recibe todas las quincenas   sus ingresos  lleva  tranquilidad a su  hogar  porque puede  comprar  comida, medicinas, ofrecerle    la educación  que merecen sus  hijos, todo esto genera  paz  social que es  la que no podemos perder, dijo Alicia  Jiménez.

Que quede   claro que el  sector productivo empresarial jamás ha dicho que no queremos sentarnos a dialogar, por el contrario, estamos dispuestos ya que  también tenemos propuestas  cónsonas  de  como   producir  y llevar los bienes  y servicios a los hogares de  todos los panameños.