Solicitud de Cortizo al Parlacen deja en evidencia que el ente es una “cueva de maleantes”, afirma abogado Moisés Bartlett
Javier Collins Agnew
La Verdad Panamá
El abogado Moisés Bartlett arremetió contra la solicitud de juramentación presentada por el expresidente Laurentino Cortizo al Parlamento Centroamericano (Parlacen), calificando este movimiento como un intento desesperado por obtener inmunidad ante posibles procesos judiciales.
Según Bartlett, la petición de Cortizo confirma lo que varios actores de la sociedad civil panameña han venido señalando por años: el Parlacen se ha desvirtuado y transformado en un refugio para políticos que buscan evadir la justicia.
Desnaturalización del Parlacen
Bartlett fue enfático al subrayar que el Parlacen, una institución originalmente concebida para fomentar la integración y el desarrollo democrático en la región, ha perdido completamente su rumbo. “Se ha convertido en una cueva de maleantes, un organismo que avala la impunidad”, declaró.
El abogado explicó que, en lugar de ser un foro para promover la cooperación y el progreso económico, se ha transformado en un espacio donde los dirigentes políticos de diferentes países encuentran un “estilo de vida cómodo”, pagado por los contribuyentes, sin ofrecer ningún beneficio tangible a las naciones que representan.
El letrado también criticó la poca productividad del Parlacen y su desconexión con los intereses reales de la región. Según Bartlett, los miembros de este organismo disfrutan de lo que él denomina “turismo político”, con altos sueldos y privilegios, pero sin resultados concretos en favor del desarrollo de los países que integran el foro regional.
“Los panameños están pagando para que estos individuos disfruten de un club de vacaciones, mientras nuestros problemas reales quedan sin solución”, afirmó indignado.
Críticas a la invitación a Rusia y la influencia de Ortega
Otra de las fuertes críticas de Bartlett se centró en la decisión del Parlacen de considerar a Rusia como observador del organismo. “Es inaceptable que un país invasor, antidemocrático y completamente ajeno a la región sea invitado a participar en este foro”, sostuvo, en clara alusión a las políticas expansionistas y autoritarias del Kremlin.
Además, subrayó que esta acción refleja el dominio de gobiernos autoritarios dentro del Parlacen, señalando particularmente a la dictadura de Daniel Ortega en Nicaragua.
Bartlett no escatimó palabras al referirse a los diputados del Parlacen, a quienes calificó como “sirvientes de regímenes antidemocráticos”, que traicionan los principios de la democracia que, en teoría, deberían defender.
En este contexto, elogió la decisión de Costa Rica de mantenerse fuera del Parlacen, calificando al país centroamericano como “sabio y prudente” por no asociarse a un organismo que, según él, solo traiciona los ideales democráticos.
“Triple vergüenza” para Cortizo”
El abogado reservó una de sus críticas más duras para Laurentino Cortizo y describió como una “triple vergüenza”, que tras su discurso de campaña y sus promesas de transparencia y justicia, busque ahora unirse al Parlacen.
“Es una contradicción absoluta. Después de ser el presidente más ausente y menos efectivo de la historia de Panamá, ahora pretende esconderse en el Parlacen para no enfrentar las consecuencias de su pésima gestión”, sentenció Bartlett.
Añadió que la solicitud de Cortizo es una confirmación de lo que muchos ya sospechaban: que el expresidente está buscando protección ante posibles acusaciones por irregularidades durante su mandato.
“Se está comportando como tantos otros políticos que han encontrado refugio en el Parlacen para evitar rendir cuentas por sus acciones, particularmente en temas económicos y de gobernanza”, señaló Bartlett.
Un llamado a la justicia
El abogado hizo un llamado a la sociedad panameña y a las autoridades judiciales del país, porque es esencial que Panamá no permita que el Parlacen se convierta en un “escudo” para aquellos que buscan escapar de la justicia.
Insistió en la necesidad de revisar el rol de este organismo y considerar la posibilidad de que Panamá se retire del foro regional.
“La historia recordará a quienes usaron estas instituciones para protegerse, pero también a quienes permitieron que eso ocurriera”, dijo Bartlett.
Destacó que los panameños deben estar atentos a los movimientos de aquellos que buscan escapar de sus responsabilidades bajo el manto de la inmunidad parlamentaria.