Actualidad

Trabajadores de Minera Panamá se sienten secuestrados y temen por su salud

La orden directa de cerrar temporalmente las operaciones de Minera Panamá ante la aparición de cuadros de COVID-19, fue desafiada ayer por los directivos de esta empresa, según denunciaron varios trabajadores a La Verdad Panamá.

Estamos preocupados porque en el campamento hay varios infectados y aún así nos mantienen en la mina casi secuestrados, en condiciones precarias al punto que fuimos a desayunar y no había comida, señaló un trabajador.

Señalan los afectados que en el día de ayer los directivos les comunicaron que se reunirían a las diez de la mañana para tomar decisiones, reunión que no se dio y que cuando fueron a almorzar les ofrecieron una sopa salada que tuvieron que consumir por los calambres que padecían producto del hambre que tenían.

“Todo es un misterio, no hay nadie, solo los capataces que no informan nada y mucho menos para decirnos cuándo llegará el bus para trasladarnos al hotel donde debemos pasar la cuarentena”, señalaron.

Estamos prácticamente secuestrados, no podemos salir ni movernos para ningún lado, nos mantienen encerrados en las habitaciones y en el día de ayer ningún personal nos tomó la temperatura. Es más, los funcionarios de salud que nos monitoreaban no los vimos en el día de ayer.

Hasta  anoche  un grupo  significativo  de trabajadores  se mantenía protestando  porque, según  uno de los  voceros, autoridades  del MINSA  y directivos de la  mina  les  comunicaron  que  debían  pasar la noche  en el   lugar, cuando  el compromiso  era  evacuarlos  hacia el   hotel.

Este medio conoció que en el resort del Sheraton Bijao hay alrededor de 230 trabajadores de Minera Panamá, que solo hay dos personas del ministerio de Salud y que no cuentan con médicos ni enfermeras.

Ante la aparición de cuadros de COVID-19 en la minera, desde el 20 de marzo el MINSA había girado las primeras instrucciones para declarar un cerco epidemiológico y por la nueva situación epidemiológica se adoptó la medida del cierre temporal, acompañado de recomendaciones de carácter de salud pública.