Enfoque Global

Trump firma una orden ejecutiva ampliando las sanciones contra Corea del Norte

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este jueves una nueva orden ejecutiva imponiendo sanciones contra Corea del Norte.

Las medidas se enfocan en las compañías e individuos que comercian con Pyongyang.

El mandatario estadounidense dijo que con esta acción se bloquea el flujo de recursos que sirven para financiar el programa de armas nucleares norcoreano.

“Nuestra nueva orden ejecutiva cortará los fondos que financian los esfuerzos de Corea del Norte para desarrollar las armas más mortales que conoce la Humanidad”, apuntó.

Donald Trump, Moon Jae-In y Shinzo Abe.

Aseguró que la orden ejecutiva otorga poderes discrecionales al Departamento del Tesoro para sancionar a los bancos extranjeros que realicen negocios con Corea del Norte y reveló que el Banco Central de China ordenó a las instituciones financieras de ese país que dejen de trabajar con Pyongyang.

“Los bancos extranjeros enfrentarán una elección clara: hacer negocios con Estados Unidos o facilitar el comercio del régimen sin ley de Corea del Norte. Y no tendrán tanto para comerciar. Esta nueva orden nos dota de herramientas poderosas”, dijo.

Trump explicó que las sanciones afectarán las redes comerciales y de transporte marítimo de Pyongyang.

“Quiero dejar claro que esta orden apunta solo hacia un país y es Corea del Norte. El régimen ya no puede contar con otros para facilitar sus actividades comerciales y bancarias”, agregó.

Suma de sanciones

El mandatario estadounidense realizó el anuncio durante una reunión con el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-In.

La firma de la nueva orden ejecutiva por parte de Trump en contra el régimen de Kim Jong-un se produce menos de dos semanas después de que el Consejo de Seguridad de la ONU adoptara por unanimidad las que hasta ahora son las sanciones más duras contra ese país.

Trump hizo su anuncio durante una reunión con los mandatarios de Japón y de Corea del Sur.

Estas medidas incluyeron limitaciones a las importaciones de petróleo y derivados y la prohibición de las exportaciones de textiles de Pyongyang.

Además, afectaron también a los norcoreanos empleados fuera del país, pues establecen que éstos no recibirán permisos de trabajo para tratar de impedir que envíen fondos a su tierra natal.

Las últimas sanciones de la ONU fueron menos drásticas de lo que buscaba Estados Unidos, dada la oposición que mostraron China y Rusia con algunas medidas.

En principio, Washington pedía la prohibición total de la venta al régimen norcoreano de gas, petróleo y productos refinados por parte de países miembros de la ONU.